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[Miquel Vidal <miquel AT barrapunto.com>]

El vie, 08-06-2007 a las 09:05 +0200, david escribió:
> No quería insistir en el tema...
> Pero si el problema es que la lista es pública la cosa sería tan fácil
> como escribir directamente a quiénes se han interesado por la cuestión
> pidiendo discreción si es necesario.
> Sí, ya sé que es una obviedad.
> 

no, no equivocarse. Llueve sobre mojado, y no tiene nada que ver con la
discreción, sino con la opacidad y el oscurantismo que caracteriza la
gestión de Ignasi en CC-es desde que echó a andar el proyecto. Siento
decirlo con crudeza, pero las sutilezas en este caso son perfectamente
inútiles. Ya que va a ningunear toda queja, al menos que quede
constancia pública de que hay gente en desacuerdo con este proceder, por
si responsables de CC tomasen alguna vez cartas en el asunto, que no se
diga que nadie dijo nada. Muchas veces se ha solicitado con corrección
información acerca de la forma de tomar parte en las decisiones de CC-es
o de participar en el proyecto, o sobre la función de esta lista, o la
del propio Ignasi (¿actúa solo, acompañado? Nadie lo sabe), pero las ha
ignorado sistemáticamente con una actitud entre displicente y
autoritaria ("se hace lo que yo digo, y no voy a discutir más del
tema"). No considera necesario dar explicaciones a nadie. El margen de
confianza que razonablemente solicita David Maeztu se le lleva dando
durante años, pero sistemáticamente trata a los miembros de esta lista
como una suerte de cla, de palmeros, que debemos estar contentos con que
de vez en cuando nos mande un enlace, sin posibilidad alguna de
preguntar o intervenir en nada relevante, salvo los privilegiados a los
que consulta en privado o reúne en algún secreto e ignoto buró. El
resultado es que CC-es es irrelevante y, por desgracia, se desaprovecha
el poder de lobby, ejemplar y movilizador que puede desempeñar. Y la
capacidad para implicar a más gente en favor de la cultura libre y a
responder a los FUD de poderosos enemigos que se ceban ante tanta
pasividad. Aunque no se nos escuche, creo que algunos nos hemos ganado
al menos el derecho a quejarnos. 

Aunque todo es muy extraño para el modo de funcionar de los proyectos
basados en el trabajo voluntario y relacionados con la cultura libre,
todo esto daría un poco igual si no fuese porque el caso extremeño
afecta al núcleo del trabajo de CC-es (nada menos que a la la
"legalidad" de las licencias), y porque CC tiene cierta responsabilidad
pública para defender su modelo de licencias, en la medida en que es
punto de referencia para la cultura libre, y sus decisiones pueden
afectar a mucha gente.

Y, por último, nada impide que llevase con discreción los contactos
privados que fuese, que no dudo que existan, pero al mismo tiempo que se
promoviese por ejemplo un borrador elaborado en la lista para facilitar
una toma de postura pública y presentársela a los responsables
extremeños y a la propia Hispalinux para que lo respaldase antes de la
aprobación de la proposición. Eso sería lo normal. Pero aquí nada es
normal.

miquel